Es
nombrar adolescencia y a casi todos nos viene a la cabeza “conflictos”, no
descubro nada nuevo cuando digo que la
adolescencia es la antesala de todos los conflictos que tendremos en nuestra
juventud y en nuestra madurez, numerosas técnicas existen para modificar,
moldear la conducta de nuestros jóvenes, adolescentes que se pierden en el
camino, ya que están en el cruce de camino entre la niñez y la juventud, “para
unos son pequeños y para otros son ya lo suficientemente grandes como para
actuar con madurez”.
Trabajar
con ellos es todo un reto, cada adolescente es único y con él lleva una mochila
de inseguridades, que no saben ponerle
nombres, muchos de ellos no saben muy bien lo que siente y sí se permiten
sentir, cada diez minuto siente algo diferente, pasan del odio a te quiero en
décima de segundos y están lo suficientemente estresados que no saben muy bien cómo
actuar.
Todos
sabemos que los mayores conflictos son con los padres y con el entorno más
próximo; la escuela, los centros educativos están rebosados de adolescentes
dotados de creatividad y no saben qué hacer con ella, muchos de ellos
desconocen sus dones y sus frustraciones se reflejan en sus notas académicas o
en su relación con sus iguales, profesores y por supuestos con los padres.
El
dibujo es un medio de comunicación idóneo para nuestras emociones, nos permite
pintarlas de colores, camuflarlas a través de casas, animales o simplemente a
través de líneas con sentidos o sin sentidos podemos expresar todo lo que no
sabemos decir o no nos atrevemos.
Con
la palabra se construye sueños, ya que nuestros pensamientos se nutren de
ellas, para muchos de nuestros adolescentes expresar lo que sienten con total libertad en un mural es
dejar fluir todo el batiburrillo de sentimientos internos.
Os
quiero presentar algunas de las actividades que podemos hacer a nivel educativo
tanto como padres , profesores con
nuestros adolescentes de una manera divertida y dotada de creatividad para
resolver y poner “nombre y apellidos a
sus emociones”.
Los
objetivos de estas actividades son:
1.
Identificar nuestras emociones a través
de nuestros dibujos y las palabras
2.
Descubrir nuestro potencial interior.
El
material que necesitamos es papel de diferentes tamaños y formatos, colores,
lápices de colores y un espacio tranquilo y música clásica de fondo para que
nuestros alumnos, adolescentes se conecten a sus emociones.
Una
primera actividad puede ser dibujar un corazón y preguntarle a quien tienen
dentro de él o de ella
Otra
actividad es dibujo libre que nos dibujen aquello que siente en ese momento
para luego nos cuente cómo se siente, o bien decirles palabras y que dibujen
esas palabras….
Las
actividades con pintura y las palabras pueden ser inmensas y se pueden adaptar
a cualquier emoción que queramos trabajar con nuestros niños.
A
continuación os muestro algunos de los dibujos y murales que están haciendo
nuestros alumnos `para trabajar las emociones y sobre todo las habilidades
sociales como la asertividad, la tolerancia a la frustración que son tan
importantes para construir la identidad y personalidad de nuestros alumnos.
El dibujo es una disciplina o actividad que podemos fomentar en los niños en cualquier lugar,
con él aprenden a concentrarse, observar y desarrollar sus habilidades
Este mural es la construcción de un sueño, de uno de otro de nuestros alumnos.
¡Ellos disfrutarán y poco a poco irán descubriendo un potencial
para expresarse y desarrollar su creatividad!
email de contacto: mercechicla3@gmail.com
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